LA ZONA MUERTA

Titulo Original: The Dead Zone
Año: 1983
Duración: 103 minutos aprox.
Nacionalidad: USA
Color

Dirección: David Cronenberg
Guión: Jeffrey Boam
Fotografía: Mark Irwin
Montaje: Ronald Sanders
Música: Michael Kamen
Reparto: Christopher Walken, Brooke Adams, Martin Sheen, Tom Skeritt, Herbert Lom, Anthony Lerbe y Collen Dewhurst

Si cuando hablaba de La Mosca decía que se trataba de un film de transición entre la crudeza gore de los primeros films del canadiense y del terror psicológico o demencial posterior, que gusta tanto a los amantes del gore como a los cinefilos “serios”, con La Zona Muerta ocurre exactamente lo contrario, la adaptación de la novela de Stephen King no permitía muchos alardes gore ni una gran complejidad emocional, dejandola un poco en tierra de nadie, olvidada por los aficionados de una facción como de la otra, minusvalorada, sin ser transición ni rara avis, sencillamente situada, nunca mejor dicho, en una zona muerta. Y aunque es una de las menos perturbadoras películas del canadiense, La Zona Muerta cuenta con un buen cumulo de las constantes del cine de Cronen- berg. La Nueva Carne esta presente, aun de forma soterrada, un cambio físico que deviene en aislamiento, mezcla de don y maldición, ese mismo aislamiento del protagonista y su coqueteo con la demencia son perfectamente análogos a los de otros personajes de la filmografía del director. Pero, sin necesidad de buscarle un nexo de unión con otros films de Cronenberg, se trata de una película interesante, que mantiene la tensión y el interés pese a su estructura, tan poco adecuada para el cine, que se ajusta más a un tele film en dos o tres capítulos, inevitable a la hora de conseguir una fiel adaptación y que produce cierta confusión temporal, salvada por el buen hacer del director y los actores, fascinante Walken, correcto Sheen y el siempre secundario Tom Skerritt en un corto pero importante papel, sin olvidar a Brooke Adams que hace amable un personaje que de otra forma seria odioso.
No querría terminar sin hacer mención a la gran moraleja de la película: Esperar al matrimonio para practicar el sexo con tu pareja puede provocar largos periodos de coma profundo. Ahí queda eso.

BLADE II

Titulo Original: Blade II
Año: 2002
Duración: 115 minutos aprox.
Nacionalidad: USA
Color

Dirección: Guillermo del Toro
Guión: David S. Goyer
Fotografía: Gabriel Beristain
Montaje: Peter Amundson
Música: Marco Beltrami
Reparto: Wesley Snipes, Kris Kristofferson, Leonor Varela, Luke Goss, Norman Reedus, Ron Perlman y Santiago Segura

La, de momento, trilogía Blade es probablemente una de las mas irregulares series con las que uno se puede encontrar pululando en los videoclubs. Partiendo de una primera entrega correcta pero bastante sosa y acabando con un autentico bodrio que no hay por donde coger, cuenta en su segundo acto con lo que podríamos llamar una buena película de acción sin pretensiones. Y es que la labor de Guillermo del Toro se hace notar, así como un mayor compromiso por parte del guionista, que consiguen una historia interesante, aunque no muy original, con un buen pulso narrativo y con suficientes toques terroríficos como para que uno tenga presente que los vampiros no pueden ser sustituidos por narcos o mutantes y tener la misma película. Y es que desde el acierto de los Segadores, tanto a nivel argumental como, principalmente, de diseño (diseño que le debe mucho al mítico Depredador y al las descripciones de Lovecraft en En Las Montañas de la Locura), Blade II destaca en muchos aspectos. La puesta en escena, de sabor clásico, es clara y funcional, sin dejar de ser expresiva, apoyada con una estupenda fotografía y una partitura eficaz, que unidos al diseño de producción, grandes escenarios, tajes suntuosos y neogoticismo, otorgan al producto una dignidad y calidad que sorprende en una producción de estas características.
Puede considerarse un ensayo para Hellboy, de hecho Mike Mignola ya participo en las labores de diseño de este film, pero no cabe duda que del Toro hizo una gran labor que, entre otras cosas, le supuso una oferta en firme para dirigir el tercer Harry Potter, que rechazo y acabo en manos de Alfonso Cuaron, si el resultado hubiera sido mejor o no nunca lo sabremos, pero a cambio tenemos HELLBOY, nada despreciable adaptación de otro cómic sobrenatural, esta vez como proyecto personal del Mejicano.

PESADILLA EN ELM STREET 3: LOS GUERREROS DEL SUEÑO

Titulo original: A Nightmare On Elm street 3: Dream Warriors
Año: 1997
Duración:
Nacionalidad: USA
Color

Dirección: Chuck Russell
Guión: Wes Craven, Frank Darabont, Chuck Russell y Bruce Wagner
Fotografía: Roy H, Wagner
Montaje: Terry Stokes y Chuck Weiss
Música: Angelo Badalamenti
Reparto: Heather Langenkamp, Robert Englund, Craig Wasson, Patricia Arquette, Ken Sages y Larry Fishburne

Mucho más lograda la segunda entrega de la saga, Los Guerreros del Sueño, pasa por ser la más divertida secuela de la genial Pesadilla en Elm Street. El argumento es sencillo, pero se ha convertido en prototipo de secuela de película de terror donde los haya, ambientada en un hospital psiquiátrico para menores de edad y retomando el personaje de Nancy Thompson, esta vez como psiquiatra especializada en trastornos del sueño y encargada del grupo de jóvenes acechados por Freddy, a los que enseñara a defenderse en los propios sueños. Este planteamiento que promete más acción y aventura que en los films anteriores supone una interesante vuelta de tuerca, totalmente lógica, que si bien hace que se pierda gran parte del elemento terrorífico de la primera (ahora parece posible vencer), la convierte en una secuela útil y justificada, en la que se aprovecha para indagar más en el pasado de Freddy. Si en la primera parte sabíamos por que acechaba a los niños de Elm Street, en esta parte se nos dan algunas claves del por que tras morir fue capaz de volver a matar a través de los sueños... Y es que parece ser que si uno es hijo de una monja violada cientos de veces en un corto espacio de tiempo, siempre puede volver a matar tras la muerte mientras su cadáver no sea santificado con una ceremonia religiosa y debidamente enterrado. Todo esto aderezado con unas secuencias de asesinatos que van de lo cómico a lo macabro, pasando en ocasiones por lo terrorífico, destacando la de la televisión y la de la marioneta, esta ultima uno de los mayores hallazgos del film, junto con el de la serpiente.
En lo que se refiere a las cualidades estrictamente cinematográficas del film decir que, aunque este muy por debajo de la primera parte, es perfectamente correcto, mantiene el ritmo en todo momento y nunca se hace farragosa. Eso si, la progresión de la relación de Nancy con el jefe de psiquiatría y como llega este a creer tan fácilmente la historia de Freddy no esta del todo bien traída, aunque tratandose de un escollo que había que solucionar rápidamente para llegar a lo que realmente interesa de la película, es un defecto fácilmente olvidable que no empobrece el conjunto del film, que, aunque esta lejos de la genialidad del original, sobresale por encima del maremagnun de secuelas que van de lo innecesario a lo insufrible.

RAZAS DE NOCHE

Titulo Original: Nightbreed
Año: 1990
Duración: 102 minutos aprox.
Nacionalidad: USA
Color

Dirección: Clive Barker
Guión: Clive Barker
Fotografía: Robin Vigdeon
Música: Danny Elfman
Reparto: Craig Sheffer, Anne Bobby, David Cronenberg, Charles Haid, Hugh Quarshie, Hugh Ross, Dough Bradley y Catherine Chevalier

Al igual que ocurría con otras adaptaciones de sus novelas, Hellraiser por ejemplo, el encargado de adaptar y dirigir la película basada en Cabal fue el mismo Clive Barker. El resultado, Razas de Noche. Más alla de lo aconsejable, o no, de que un novelista adapte y dirija sus propias obras, el resultado, tanto de esta como de otras, es satisfactorio, pero no al 100%. Si bien Clive Barker, como es natural, respeta la esencia de sus novelas y, esto no es tan habitual, es capaz de cambiar, añadir o eliminar personajes, amen de otros muchos cambios, con el fin de adaptar el material de la mejor manera posible, también es cierto que no es un cineasta y comete muchos errores tanto en lo narrativo (el guión), como en el lenguaje audiovisual mismo. De hecho, en una de las primeras secuencias de esta película se salta el eje de los 180º (regla básica del lenguaje cinematográfico, que al saltarsela produce desorientación en el espectador) en un momento injustificable, por no hablar de que no queda clara la importancia de ciertos aspectos de la historia, como que o quien es la gran estatua (si es que es una estatua) de las profundidades entre otras cosas... Pero Razas de Noche cuenta con suficientes aciertos que minimizan estos, no tan graves, errores. Obviando el hecho de la inversión de roles, no demasiado original, nos encontramos con una historia que mezcla muchos arquetipos básicos, el viaje del héroe, el descubrimiento personal, la huida/persecución, el mesianismo y, por supuesto, la lucha desigual por defender el hogar. Todo esto facilita la identificación con los personajes que dadas las circunstancias, cada uno con un aspecto, poderes y debilidades diferentes, vienen a ser una versión Bakeriana de los X-Men. No obstante la película derivo en una serie de cómic books a modo de continuación de ese final abierto, comparable al de la segunda entrega de sagas como La Guerra de las Galaxias, Matrix o la más reciente, Piratas del Caribe (en lo irresoluto, me refiero).
No querría terminar sin mencionar el fantástico papel que realiza David Cronenberg como el autentico monstruo de esta función, que aporta los mejores momentos de terror de Razas de Noche.

SOY LEYENDA

Titulo Original: I Am Legend
Autor: Richard Matheson
Primera Publicación: 1954
Nacionalidad: USA

Con Soy Leyenda nos encontramos ante un gran clásico de la novela de ciencia ficción (teñido con un poco de terror, pero poco), que tras una premisa que puede resultar absurda (y lo ha sido en sus adaptaciones cinematográficas, y lo seguirá siendo probablemente en la que apunto esta de estrenarse), la historia del ultimo hombre sobre la tierra dominada por vampiros, explora lo relativo de binomios, en principio absolutos, como normal/anormal o bien/mal. Pero lo mejor de soy leyenda no es eso, sino el análisis que hace de la soledad, dividida, como el libro, en cuatro fases en las que Neville, el protagonista, se enfrenta a su desesperada situación de formas distintas. Lo mejor a este respecto serán probablemente los capítulos en los que establece una relación con el único ser no infectado por el virus vampírico que ve, un perro bastante feo, que protagoniza la parte más emotiva y amable, y finalmente más triste y dura, de la novela. Huid de ella si lo que buscáis es acción o aventura, las virtudes de esta novela son otras, no solo las ya mencionadas anteriormente, a estas se le unen un estilo narrativo interesante, en el que se mezclan el narrador omnisciente y el monologo interno, con un lenguaje escogido pero directo y llano, al que se suma el logro de hacer plausible ese mundo post epidemia vírica. Sin duda una pieza de gran interés para los aficionados, los fanáticos y los simplemente no prejuiciosos con la ciencia ficción.