
Año: 2002
Duración: 93 minutos aprox.
Nacionalidad: USA
Color
Dirección: Eli Roth
Guión: Eli Roth y Randy Pearlstein
Fotografía: Scott Kevan
Montaje: Ryan Folsey
Música: Nathan Barr y Angelo Badalamenti
Reparto: Rider Strong, Jordan Ladd, James DeBello, Cerina Vincent, Joey Kern, Arie Verveen, Robert Harris, Hal Courtney y Eli Roth
Cinco jóvenes van de vacaciones a una pequeña cabaña aislada en el buque de

La primera película de Eli Roth dista mucho de resaltar por su calidad, de hecho cuenta con la mayor parte de los vicios y defectos que han hecho infumables la mayor parte de las cintas de terror que nos llegan de Norteamérica desde mediados de los noventa... Un guión con grandes lagunas, en ocasiones tan mal rodado que algunas situaciones

Pero, pese a todo esto, la película cuenta con unos valores a su favor que hacen que se la pueda rescatar del olvido al que le condenaría merecidamente lo dicho algo más arriba. Por un lado, el gusto dosificado por el gore y la voluntad de exceso de la que hace gala Roth, que si bien no llega a cuajar del todo en Cabin Fever, si la hace desmarcarse de la mayor parte de producciones de la época y daban pie a esperar que nos encontráramos ante un nuevo valor del genero. Ademas, lo original del planteamiento del film, la impotencia ante una enfermedad (real, por cierto, el virus devorador de carne existe y también una poco frecuente variedad de proceso más acelerado) es un planteamiento novedoso que hay que aplaudir, eso permitía

En definitiva, Cabin Fever es una película que no llega a cuajar, aunque no llega nunca a ser tediosa, tan mala como cualquier producción de teen terror americano post Scream, pero con unos puntos de originalidad y personalidad que la hacen merecedora de un visionado.
